Luisina Scarafiocca
El mes que viene llega a los cines Alien: Romulus, la séptima película de la serie de Alien, que transcurre entre la primera y la segunda película.
Esta es una película que acarrea una historia bastante compleja, en una franquicia que tuvo sus enormes éxitos y también bastantes fracasos. Esta entrega puede ser la que por fin devuelva la franquicia a sus días de gloria, o la que termine de enterrar a Alien como una franquicia que decepcionó una y otra vez a sus fans. Ahora ¿Cómo llegamos hasta acá? Bueno, el guión de la primera película de Alien se basó en obras de ciencia ficción y terror, como Terror en el espacio, Forbidden planet y The thing from another world, y el éxito de Star Wars en 1977, que generó un interés creciente en el género de ciencia ficción, llevó a que se produjera esta primera película. El trabajo impecable de H.R. Giger en el diseño de arte, reconocible en cualquier lado, y la banda sonora de Jerry Goldsmith terminaron de darle forma a esta obra.
Es así que Alien, de Ridley Scott, de 1979, sigue siendo una de las mejores películas de ciencia ficción y terror jamás hechas. Y Aliens de James Cameron, la secuela de 1986, es una de las mejores películas de acción y ciencia ficción hasta ahora.
Lo que pasó después es que Alien 3 y Alien Resurrección fracasaron en los 90s. Y el intento de crear una franquicia paralela con el cruce de Alien versus Depredador en 2004 y 2007 no ayudó mucho. Aunque fueron relativamente bien recibidas (la segunda mejor que la primera), no hicieron mucho para sumar positivamente a la percepción popular del universo de Alien.
En 2012, el director original, Ridley Scott, regresó a la franquicia después de 22 años para dirigir una precuela de su primera película, titulada Prometheus, que generó mucha expectativa y no tuvo una mala recepción, pero fue muy divisiva entre fans, y criticada por algunos por ser “aburrida” y “pretenciosa”.
A partir de este momento, la historia se vuelve un poco revoltosa. En 2015, se anunció que Neil Blomkamp dirigiría una nueva película de Alien, que nunca se estrenó, porque Ridley Scott quería hacer su secuela de Prometheus en su lugar, que sería Alien: Covenant, que se estrenó en 2017, y no tuvo muy buena recibida en los cines. Fox canceló inmediatamente la secuela de Covenant.
Con este panorama, Disney intentó cambiar de rumbo, viendo que la franquicia no estaba yendo por buen camino, y, en 2019, anunció que el nuevo proyecto de Alien sería una serie, no una película, y que no seguiría la trama de Covenant. Pero nada más meses después, anunciaron que la película de Scott sí iba a realizarse. La serie quedó perdida en el infierno de la preproducción, pero la segunda vuelta de Scott volvió a generar expectativas.
En 2020, se confirmó que la película estaba en desarrollo, pero casi no hubo noticias hasta 2023, por lo que se había considerado ya cancelada. Nunca es buena señal para los fans que no haya noticias, ni buenas ni malas, sobre una producción, sobre todo una tan grande y con una historia tan larga detrás. La idea de una serie quedó en el olvido, la vuelta de Scott estaba en el aire.
En 2023 hubo novedades por fin por fin, con la confirmación de que Scott estaba trabajando en la secuela de Covenant que había sido cancelada, y habría una nueva película: Alien: Romulus.
Y por fin, luego años de incertidumbre respecto al futuro de la franquicia, esta película llega a los cines, el 16 de agosto. Los estudios llevan más de 30 años intentando recuperar la gloria de la franquicia, que los fans tampoco quieren abandonar del todo, pero ya hay quienes comentan que en este punto, sería mejor que dejen que la saga del xenomorfo descanse.
Por lo pronto, está por verse cómo va a ser recibida esta nueva entrega, y qué nos dirá eso del futuro del universo de Alien.