Por Camila Tapia

 

La moda también puede ser verde: El Auge de las ferias de ropas usadas y la moda circular.

Upcycling, ferias de ropa, moda circular son algunas de las tendencias en la moda verde, además de cuidar la economía se puede generar un gran cambio en el medio ambiente.

La industria de la moda, tiene una huella bien marcada que destila contaminación, carga con la bien lograda etiqueta de ser la segunda industria más contaminante y tanto así que para el 2050 sería la culpable de un 26% del presupuesto total global de carbono según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente.

Hoy en día la industria es la culpable de un 8% de los gases de efecto invernadero y otro dato muy importante es que genera un 20% del desperdicio total de agua potable, siendo este un dato muy llamativo ya que hay muchos países, ciudades y pueblos que tienen un recortado acceso al agua potable.

Desde otro lado, tenemos el fenómeno conocido como “moda rápida”; haciendo uso de una fabricación masiva de prendas donde marcas y consumidores renuevan su ropa por temporadas. Este modelo que se vino sosteniendo desde los ’80 hasta el día de hoy, es responsable de desechos contaminantes, montañas de basura de ropa, contaminando y generando perdidas de los espacios naturales.

En Rosario, un estudio de micro plásticos hecho en 2016, encontró en nuestro río residuos textiles, que en su composición contienen principalmente PVC y PET. Estas fibras textiles y micro plásticos están en el agua que tomamos y alimentos que consumimos generando efectos nocivos a corto y largo plazo en el ser humano.

Hay todo un recorrido en la industria de la moda que genera un círculo constante de contaminación desde el comienzo de fabricación de la prenda hasta sus posteriores desechos, las marcas y nosotros como ciudadanos que somos parte de ese sistema, tenemos la tarea y la responsabilidad de pensar en cómo revertir estos procesos. Buscar otras alternativas para disminuir los efectos contaminantes que genera nuestro consumo, es vital.

Antes que de hablar de moda circular, repasemos brevemente el concepto, la idea nace de la economía circular; que nos propone abandonar los sistemas lineales de producción donde un producto fabricado utiliza recursos no renovables y pasa por fases: de extracción, de fabricación, de utilización y de eliminación, quedando como un desecho inútil (y ya sabemos que esto no es bueno para nuestro planeta) para ser reemplazado por un modelo donde este desecho pueda volver a ser parte del proceso de fabricación. Esto se lograría convirtiendo este recurso final en bienes para generar otros, es decir, bienes finales hechos con recursos renovables y también que el bien en sí mismo lo sea.

Lo mismo pasaría con la moda circular en donde se busca optimizar los diseños, las formas de fabricación y la distribución para pensarlos de forma consciente y utilizando recursos renovables creando ropa que pueda tener más de una temporada de uso y con menos uso de recursos, dándole importancia a la vida útil del producto y a los materiales para que puedan volver a ser reutilizados.

En el país hay un fenómeno de tiendas y ferias de ropa usada que está en auge y es también una de las formas de no generar desechos y darles una segunda oportunidad a las prendas. Es una buena forma de crear conciencia y extender el tiempo de uso de estas, que al mismo tiempo pueden ser intervenidas para crear otras y una nueva forma de moda conocida como upcycling.

Micaela es dueña de Meet, una feria que se dedica a vender prendas usadas y nos cuenta un poco de donde surgió la idea de este emprendimiento: “En principio tenía la necesidad de hacer algún emprendimiento extra a mi trabajo oficial, surgió la idea de vender nuestra ropa, la ropa que no usamos y que nos ocupaba lugar en el placar, decidimos hacer un Instagram e interesándonos en el tema y buscando información y nos dimos cuenta la cantidad de daño al medio ambiente y al planeta que causa la fabricación de ropa y una vez que esta se tira a la basura, lo que tarda en desintegrarse”. Nos cuenta que fue tomando conciencia ya que a medida que avanzaba su idea “no estábamos al tanto de todo lo que pasaba, pero nos fuimos dando cuenta”, agregó.

Hablando sobre la contaminación en la industria textil, Mica dice: “Es increíble la contaminación que provoca la industria y que su necesidad de emprender surgió por lo económico y después nos fuimos involucrando en la parte social”. Recordó cómo estos emprendimientos surgen de la crisis y destacó que la mayoría de la gente con la cuál se contactó tiraba su ropa a la basura. Le sorprendió la solidaridad de las personas y cómo verdaderamente sus seguidores empezaron a interesarse por el tema.

Los emprendedores al final terminan convirtiéndose en una voz de conciencia a través de sus redes sociales y sostiene que: “Está bueno también publicar información y concientizar” y explica que un principio sólo hacía publicaciones destinadas a la venta y que ahora adoptó otra postura más consciente de su emprendimiento, “estamos haciendo publicaciones con información para concientizar”, agrega.

De la cantidad de sus seguidores que expresan sus dudas cuenta: “Mucha de la gente me habla y me dice que ciertas cosas no sabían y que ahora lo ven diferente o que piensan antes de tirar ropa a la basura” y “justamente con este tema del clima en pleno agosto un mini verano, la gente empieza a tomar mas conciencia y entiende que realmente es grave lo que esta pasando y que no sólo son publicaciones de Instagram”, explica.

Hay mucha gente que se dedica a la moda circular y nos dice que: “Así mismo te contactás con gente que está en la misma, hay un montón de paginas de moda sustentable y que yo ni conocía antes de empezar, no solo de ropa, sino de un montón de cosas”.

Desde la venta de la ropa hasta la entrega se trata de cuidar el ambiente. “Estamos contactándonos con una emprendedora que nos hace bolsitas y ahora le estamos por poner unas frases para crear conciencia y que la persona que esta comprando sepa que esta poniendo su granito de arena”, explica.

Las personas de a poco están eligiendo un rumbo más sustentable a la hora de consumir. “La gente realmente entiende que esto está pasando y que es grave y por ahí en vez de comprarte una ropa nueva, más allá de que económicamente te sirve, hay mucha ropa en desuso que cumple la misma función y que estas haciendo un gran aporte con poco”, dice Mica.

Altas temperaturas en invierno, gases efecto invernadero, enfermedades, falta de agua potable, efectos nocivos en la salud, pérdida de espacios naturales son entre otros, los resultados de la irresponsabilidad con la que manejamos los recursos y esto debe tener un cambio de rumbo si queremos vivir en un planeta habitable.

Le damos importancia a la moda y a la forma en que nos vestimos, es un recocido hecho la moda es algo que está con nosotros desde hace mucho tiempo y el concepto de “moda sustentable” o “moda circular” empieza a aparecer como una urgencia para afrontar las necesidades de nuestro planeta y adoptar nuevos hábitos que no repercutan en el medio ambiente.

Esto es un llamado de conciencia y también resistencia desde los ciudadanos hacia a las marcas de ropa. Nos preocupa y nos interesa cuidar nuestro planeta y lo estamos empezando a hacer desde abajo para arriba.